Las ventajas para l@s compañer@s que se derivan de los apoyos psicopedagógicos dentro del aula son observables des de un plano básicamente socioemocional, aunque no se deben despreciar los beneficios de carácter cognitivo que recaen de forma menos directa sobre l@s compañer@s.
Los beneficios de carácter socioemocional son múltiples, todos aquellos que se derivan de la convivencia en las aulas de personas diferentes entre si. Puesto que en la sociedad adulta sucede lo mismo, es necesario que haya contacto entre personas diferentes ya sea debido a factores sociales, psicológicos o culturales, puesto que este contacto se traduce en un enriquecimiento mutuo, que se pone de manifiesto sobretodo en las actitudes que se dan entre colectivos de índole diversa. Así pues evitamos la reproducción de prejuicios y estereotipos que siempre resultan dañinos, tanto para aquellos que los reciben como para aquellos que los ostentan. Solo de esta manera conseguiremos que la sociedad adulta sea más comprensiva y solidaria entre sus miembros.
De esta forma el trabajo con apoyo ofrece una singular oportunidad de convivir con la diferencia, ya que permite que los alumnos con ciertas dificultades puedan permanecer en una aula ordinaria con mayores oportunidades, sobretodo de nivel académico, que le permiten seguir a la par, aunque a su ritmo obviamente, el desarrollo del curso escolar. Así se posibilita mayormente su inclusión y el desarrollo de unas relaciones más satisfactorias con sus compañeros. Huelga decir que no todas las reeducaciones se centran en el aspecto cognitivo, sino que en algunas ocasiones se pone un mayor énfasis al desarrollo psicoemocional del niño, puesto que se considera necesario trabajar en las actitudes y la conducta del niño o niña de tal manera que más adelante esto se cristalice en un mayor crecimiento personal, al haberse establecido unos patrones de conducta y de actitudes que puedan favorecer el aprendizaje tanto académico como social. La convivencia en el aula se ve también beneficiada, así pues puede aprender a relacionarse satisfactoriamente con los demás sin que sus dificultades tengan que interferir entre él/ella y sus compañer@s. Por consiguiente l@s compañer@s pueden comprender, ayudar y aprender junto a él o ella.
Los beneficios de carácter cognitivo se aprecian tanto en el hecho de percibir niveles y ritmos de trabajo distintos, como en el beneficio que puede suponer el ayudar a uno de estos niños y niñas en su proceso de aprendizaje por mediante del aprendizaje cooperativo, en el cual l@s dos niñ@s salen beneficiados puesto que un@ asimila unos contenidos de forma directa, al mismo tiempo que el otr@ profundiza en su propio aprendizaje y aprende a compartir sus conocimientos con el otr@, a ayudarle a comprender.
Por otra parte, se debe destacar que la implicación del compañer@ en el aprendizaje del otr@ confiere cierta dosis de responsabilidad que entiendo como muy necesaria en todos l@s niñ@s, al mismo tiempo que podemos potenciar la no competitividad o lo que es lo mismo, la cooperación entre iguales. Del mismo modo se aprende a dar y a recibir ayuda, proceso que en muchas ocasiones resulta difícil de conseguir.
1 comentario:
Podrías poner un ejemplo detallado de una práctica educativa inclusiva en una clase de educación infantil donde haya un alumno acnee y reciba apoyos del PT.
Publicar un comentario